El que sigue

Ajá. Sigue la tele. Digo, ya encarrerados, de una vez vamos a arrasar con todos los medios de comunicación masiva, ¿les parece?... si no les parece, me importa poco, pues he quedado admirado con la calidad que tiene nuestra televisión nacional y a falta de capacidad para correlacionar palabras amorosas con armonía y sentido literario, lo primero que se me viene a la mente es criticar algo, pues lo que sucede es que:

NiñaConLaCaraMojada: ¡¡¡Mamá, me echaste agua en la cara!!!
MamáQueLeEchóAguaEnLaCara: ¡¡¡Eso es para que aprendas a respetar!!!

¿? Método poco ortodoxo de enseñarle el respeto a una hija, ¿no creen?... Pues al parecer esta pequeña escena telenovelesca contribuyó a que Telerrisa tuviera un buen rating el viernes en la mañana durante una larga hora... y miren que para mí fue una de las horas más largas de mi vida, pues a mi dentista le encanta que sintamos en serio el papel de "pacientes" en su consultorio.

Aunque debo confesarlo, oh, amigos míos, que me quedé con ganas de saber si el "ángel rebelde" va a poner en riesgo su matrimonio con el señor ese que le cae mal, por ir a visitar más seguido a su otra mitad que está en el hospital, y que, faltaba más, a su vez está casado con una señora que también le cae mal. Qué bonitas familias, como diría mi amigo Pompín Iglesias. ¿Les conté de aquella vez en que lo conocí? Era un viernes, sábado en la madrugada tal vez, yo estaba en un antro de la ciudad, de hecho se me hizo raro verlo ahí, pero dije: "bueno, es un país libre", la cosa es que... se me hacía raro que alguien de su edad estuviera en un antro... no, y aguanten, más raro se me hacía que YO estuviera en un antro, pero en fin, de repente que se para a bailar, y yo dije: "nahh... no es cierto...", pues no era cuento, ¡que se pone a bailar el señor! Pero tenía una gracia de aquellas que sólo cuando decía: "queee bonita familia, queee bonita familia", y no les miento, fueron como 20 minutos de verlo bailar, yo estaba completamente perplejo, atónito, me parecía un cuadro inverosímil que tenía que comprobar más de cerca, hasta que me valió gorro y fui a saludarlo, pero estaba tan lejos que me dieron las 3 de la mañana y que suena el timbre de mi celular... y fue así como aprendí que hay cosas más importantes que hacer a las 2 de la mañana que ver Agujetas de Color de Rosa en el Canal de las Telenovelas, por ejemplo: dormir temprano, pues no hay nada positivo de quedarse dormido viendo una telenovela, "cosas terribles pueden suceder", ejemplo: puedes soñar que ves a Pompín Iglesias bailar "La Macarena" en un antro de tu ciudad... de miedo...

¿En qué me quedé? Ah sí... pues que se termina esa novela, y todavía no me tocaba a mí pasar con el dentista, pero bueno, "terminó mi calvario", pensé... pues nooooo, fue sólo el fin de algo odioso para dar paso a algo diecisiete veces más molesto y fastidioso... adivinen... sí... ¡¡¡Vida TV!!! ("El Chou")... primero llegaron los conductores en una motocicleta que no sabían manejar, después se pusieron a bailar una canción que decía "agachaditos" más veces de las que yo le he mentado la madre al América en mi vida (y miren que es un número considerable). Acto seguido, presentaron a las señoritas conductoras del programa, quienes se llevaron sus respectivos chiflidos que denotaban la categoría de gente que asiste al set... y cuando creía que no podían caer más bajo, sucedió lo irrisorio: "y con ustedes... ¡¡¡'el Borregooooo' Navaaaaa!!!" seguido de una ovación a quien posiblemente no le moleste tanto como a mí la horrible y perturbante voz de dicho personaje televisivo de tercera... y luego:

-RecepcionistaConIntentoDeVozSexy: Romeo, ya puedes pasar...
-Romeo: ¿Ya se acabó la cajetilla de cigarros el dentista? ¬¬

En realidad sólo lo pensé, pero bueno... soy mamón, pero no tanto, bueno sí, pero no en frente de tanta gente... una pregunta: ¿ofendí a alguien con este post?