domingo, 4 de diciembre de 2005

Recibí una crítica, qué emoción

Hola, amiguitos, bienvenidos a una nueva edición de Espacio en Blanco. En esta ocasión, les comento que hace días, en uno de mis ratos de ocio patrocinados por mi pereza ya por muchos conocida, me encontré con un interesantísimo blog, de nombre Blogofobia-, el cual al principio me pareció entretenido, pues criticaba a José Luis Ávila Herrera, una de las mayores vergüenzas en la historia de la humanidad... bueno, de los blogs. Posteriormente, "El Pirata" (pseudónimo con el que se da a conocer el autor intelectual de Blogofobia-) realiza un post tirándole a Semidios, aunque realmente sin un fundamento claro, sino como algo recién salido de la mente de un retrasado mental (sin ánimo de ofender a los niños Teletón). Tres días después, llegó la crítica hacia Espacio en Blanco, por la cual estoy muy agradecido, ya que me hizo pasar amenos momentos de hilarante entretenimiento observando el poco coeficiente intelectual del pseudocrítico.

Normalmente, una crítica tiende a ser polémica, atraer gente, tener puntos de vista encontrados, diferentes argumentos, debatir enfáticamente, calentar los ánimos, ponerle sabor al guacamole, chispas de chocolate al helado y nuez con cajeta y cobertura de mermel... en fin, ¿de qué estaba hablando?... Ah, sí... pues después de recibir el comentario número 26 en este post, proveniente de "El Pirata", me puse mis tenis Puma y corrí, corrí y corrí como nunca, oh amiguitos del espacio bloguidimensional, directito hacia el blog del culturoso "Pirata", y, esperando refutar algunos de sus letrados puntos de vista, que me encuentro con... esto.

¡No hay nada que discutir! ¡No hay crítica que desacreditar! ¡Jijijijiji! Y no precisamente porque el Pirata haya sufrido una crisis disléxica mientras añadía el link de su blog cuando escribía su comentario en mi post anterior (que sí sucedió, porque escribió http://blogofoboa-...); sino porque, además de quedarme contemplando la belleza de sus palabras, con esa categoría y clase que solo en su "blo" he tenido la gracia de observar, me reí primero cuando dice que Tampico está "a la par de Tijuana" (dile a tu maestra que te enseñe un mapa de la República Mexicana, pues creo que ya debes tener edad para conocer un poquito acerca de Geografía de México, bueno, al menos eso juzgo por tus comentarios que ya parecen de todo un hombrezote de sexto de primaria...) y se dispone a divagar acerca del asesinato de Colosio (ande, acéptelo, Piratín, esa tendencia al desvarío me la ha copiado usté a mí). Más adelante, me llama Junior hijo de mí yunouguat, critica mi descripción en el perfil (misma que recibió un Grammy en la pasada entrega), y se arranca con los albures... ¿porqué? ¡oh, diosito de los blogs!, ¿porqué? ¿acaso se le terminó la imaginación? ¿acaso su intelectualidad explotó por completo cuando utilizó la palabra ipsofacto? (que seguramente no debe saber al 100% qué significa, pues quien realmente conoce de la lengua, sabe que son dos palabras: ipso facto).

Acto seguido, el señor hace uso de su interesante vocabulario para desacreditar mi post de la venta de garage, que me dolió hasta el alma, pues realmente espeaba su aprobación para poder dormir tranquilo esta noche =(

El finísimo albur continúa, la vulgaridad crece, pero la coherencia en el texto nomás no... por lo que le sigue con el post de mi trabajo, se lleva de corrido el de la mala publicity al sushi Seúl... y de una vez ofende a los lectores del blog, comparándolos con esa cosa que tiene él en lugar de masa encefálica.

Además de mostrar clara indignación y envidia porque no lo invité a mi fiesta con las extranjeras (perdóname en serio, chiquito, era para mayores de 18 años... y te juro que aún con credencial de elector, no me convences de tener más de 10 años, por tu forma de escribir), después incluye en su mordaz, objetiva y carlosmonsivaiesca crítica, una finísima dedicatoria a mi hermana, otra a mi madre, y finaliza con el sabio consejo de que deje de escribir, porque es pérdida de tiempo para mí... ... ... ... ... ¡¡¡cuero mil ocho mil chocomilk!!! ¡¡¡se preocupa por mí y mis horas de sueño!!! ¡Yo sí me enamoré de él!
¿Ustedes no?

Lamentablemente, querido Pirata... tengo que informarte que seguiré escribiendo, quieras o no, pues estoy 100% seguro de que cualquier persona en su sano juicio que desee leer un blog, preferirá sin lugar a dudas visitar este Espacio en Blanco que tanto adoras, que el tuyo. Pero no te preocupes, amiguito... ¡te aseguro que en algún lugar del mundo habrá un espacio para ti! Un espacio mágico y divertidijirijillo donde podrás jugar y pasar un rato agradable con niños de tu misma edad, clase social y coeficiente intelectual... con quienes podrás hacer todas esas cosas tan lindas que describes en doble sentido en tu blog... un lugar donde todos aplaudirán tus albures... un lugar donde serás el rey de la crítica de periodicazo vespertino... un lugar donde todo mundo visitará tu blog y te amará y vivirás en un resplandor eterno de felicidad... lo único que tienes que hacer es dirigirte a tu teclado, y presionar la clave mágica: Alt + F4 ¡¡¡Y LISTO!!! Que seas feliz, mi querido Pirata... hasta pronto.

¡¡¡Te queremos, Pirata, te queremos!!! =)

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